16/12/2014
En nuestro especial sobre calefacciones ya hemos hablando del calor azul, del suelo radiante o pellets. Hoy queremos dedicar nuestro post a un método más usual y conocido: el gas. Si estás pensando cambiar el sistema de calefacción en tu piso de alquiler, ¡muy atento!
¿Cómo funciona?
Necesitan tener suministro de gas natural, es lo primordial. Teniendo la materia prima y con una instalación más o menos compleja y una caldera de gas lo tienes todo listo. La caldera no es más que un depósito que calienta agua, usando el gas como combustible. Al convertir el agua en vapor fluye por el circuito hasta llegar a los radiadores.
Tipos de caldera de gas
Gas Estancas
La cámara de combustión está sellada, los gases que producen la combustión no entran en contacto con los gases de nuestro entorno, por lo que son más seguras.
Gas de Bajo NOx
También son estancas pero además su diseño hace que emitan menos óxido de nitrógeno
Gas de Condensación
Tienen la ventaja de reutilizar la energía del vapor de agua de forma más eficiente que las anteriores. Ahorran más consumo de gas y son seguras y eficaces.
Gas Atmosféricas
La cámara de combustión se haya abierta y el aire de la combustión es del lugar donde está la caldera. Contamina mucho más y resulta mucho menos eficiente y segura.
¿Te conviene?
Los sistemas de gas son los más respetuosos con el medio ambiente y además los más ajustados económicamente hablando. No sólo reducirás la contaminación con emisiones más bajas de gas a la atmósfera, sino que además tu bolsillo no sufrirá. Encima la vida útil es más larga que con otro tipo de calefacciones, es un sistema cómodo y la caldera ocupa poco espacio.