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Todo lo que necesitas saber sobre avales de inquilinos en el alquiler



La crisis económica y el aumento de la morosidad provocan desconfianza entre los propietarios de pisos de alquiler, pero ¿son los avales para inquilinos la mejor solución?

avales de inquilinos

El aval tradicional

Un aval tradicional es un aval bancario, es decir, una garantía bancaria que asegura el cumplimiento de una determinada obligación económica. Muchos propietarios que alquilan de forma particular deciden pedir un aval bancario de inquilinos como seguro. Con el aval bancario, si la persona no responde económicamente, el avalista deberá hacerse cargo de sus obligaciones financieras.

Una garantía que no termina de funcionar

Cuando un propietario decide que los avales de inquilinos serán sus garantías para alquilar con tranquilidad comete un error.

En primer lugar, limita mucho los candidatos a inquilinos porque es difícil conseguir el dinero necesario para dejar un depósito en efectivo por el importe requerido. El aval paraliza los ahorros del inquilino, que aunque permanecen en el banco no puede disponer de ellos.

Además, las entidades bancarias en la actualidad han endurecido las condiciones para conceder este tipo de avales y es necesario buscar alternativas.

Medidas preventivas

Hay alternativas a los avales de inquilinos mucho más efectivas, como hacer un buen estudio de solvencia y viabilidad. Si se constata que un arrendatario solo destinara un tanto por ciento al pago de su renta que permita que, son su sueldo mensual, pueda hacer frente a posibles inconvenientes, tendrás un alquiler seguro.

En Alquiler Seguro introducimos en este sentido la figura del avalista solidario. Cuando un candidato no cumple con las condiciones requeridas necesita una persona que responda por él. No hay dinero de por medio, sino documentación, el avalista solidario tendrá que presentar la misma documentación que el candidato a inquilino para pasar el estudio de solvencia y viabilidad.

Aval bancario, avales solidarios… En definitiva avales de inquilinos. Al final de lo que se trata es de saber que ante cualquier impago el propietario no se quedará desamparado, así que opta por implantar medidas preventivas con profesionales como Alquiler Seguro.





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