¿Qué es el seguro de alquiler?

Alquilar una vivienda siempre supone una pequeña incertidumbre: ¿pagarán puntualmente?, ¿cuidarán el piso?, ¿qué ocurre si hay un impago?
El seguro de alquiler surge como una solución práctica para dar tranquilidad tanto a propietarios como a inquilinos.
¿Qué es un seguro de alquiler?
Es una póliza que protege al propietario frente a los principales riesgos que pueden surgir durante el contrato de arrendamiento. No se trata solo de cubrir impagos, sino también de garantizar asistencia jurídica y, en muchos casos, daños en la vivienda.
Principales coberturas
Aunque dependen de la aseguradora, las más habituales son:
- Impago de rentas: la compañía paga al propietario las mensualidades pendientes.
- Defensa jurídica: asistencia legal en caso de conflictos con el inquilino.
- Daños en la vivienda: algunos seguros incluyen cobertura por desperfectos causados por el arrendatario.
- Gestión de desahucio: en situaciones extremas, el seguro se hace cargo de los costes del procedimiento.
Beneficios para el propietario
- Tranquilidad financiera: asegura el cobro de la renta.
- Seguridad legal: acceso a abogados especializados en arrendamientos.
- Ahorro de tiempo: menos preocupaciones en la gestión de conflictos.
Beneficios para el inquilino
Aunque parezca pensado solo para el propietario, también aporta ventajas al inquilino:
- Contrato más claro y seguro.
- Mayor confianza del arrendador, lo que puede facilitar la aprobación del alquiler.
¿Merece la pena contratarlo?
Si bien supone un coste adicional (suele rondar entre un 3% y 5% de la renta anual), puede evitar pérdidas económicas mucho mayores en caso de impago o problemas legales.
En definitiva, es una herramienta que aporta tranquilidad y seguridad jurídica a ambas partes.